miércoles, 22 de mayo de 2013

PROBLEMAS SEXUALES MÁS COMUNES


 

¿Tienes dificultades para conseguir un orgasmo en tus relaciones sexuales? ¿No consigues una erección durante el tiempo que mantienes relaciones sexuales? ¿Sientes dolor genital ante la penetración de tu pareja? ¿Eyaculas muy pronto y tu pareja se siente frustrada?

 

Conocer los problemas sexuales más comunes pueden ayudarnos a distinguir si realmente esto nos afecta a nosotros y debemos tomar cartas en el asunto para poder vivir una vida sexual más plena  y satisfactoria. La impotencia, frigidez o eyaculación precoz son problemas sexuales mucho más comunes de lo que creemos y afecta a gran parte de la población y no necesariamente debido a una edad madura.

 

 
 
Los problemas más comunes son:

 

- Frigidez: que es la incapacidad de sentir placer a través de la penetración, es decir, no hay goce con el acto sexual, aunque si exista lubricación y todo esté bien anatómicamente hablando. En la mayoría de las ocasiones su causa suele ser psicológica: no existe deseo hacia su pareja y no se acepta, miedos, fobias…

 

- Impotencia: incapacidad de sentir una erección plena y satisfactoria. El pene no se irriga por completo y por tanto no hay erección y por tanto no puede darse la penetración. En este caso sí puede ser una causa física y en el caso de que ésta sea desechada por el médico hay que acudir a un profesional sexólogo para solucionarlo.

 

- Eyaculación precoz: si hay erección pero la eyaculación es tan rápida que la pareja no puede llegar al orgasmo. Esto provoca problemas generalmente en las parejas y también debe consultarse con un profesional y tiene generalmente solución más a corto plazo de lo creemos. Se trata sobre todo de saber controlar nuestras reacciones alargándolas en el tiempo y controlando nuestros pensamientos.

 

- Eyaculación retardada: es el caso contrario, hay erección pero tarda demasiado tiempo en eyacular o no llega.

 

- Dispaurenia (hombre) o vaginismo (mujer): se produce dolor al eyacular en el hombre y con la penetración en la mujer. Generalmente es debido a un espasmo involuntario de los músculos genitales.

 

- También niveles hormonales bajos pueden causar tanto en la mujer como en el hombre problemas en la líbido sexual ante una menstruación, o la menopausia en la mujer como una falta de testosterona en el hombre.

 

 Todos estos pueden deberse a dos causas: físicas o emocionales. A veces nuestras emociones pueden causar problemas físicos afectando a nuestra respuesta sexual. Por ejemplo, tendemos a pensar que una mujer debe estar excitada como un hombre al comienzo del acto sexual, pero esto no tiene por qué ser así necesariamente. La mujer necesita una estimulación sexual previa que es mucho más física y el hombre sin embargo es mucho más visual.

 

Así mismo si existen problemas externos tanto personales como problemas económicos o laborales, como en nuestra relación con nuestra pareja, esto puede afectar también en nuestras relaciones sexuales.

 

Los hombres y las mujeres son muy diferentes en muchos aspectos y uno de ellos es el tratamiento que le podemos dar al sexo. Por ejemplo, si una mujer ha discutido con su pareja o no se siente querida seguramente su respuesta cuando llegue el momento de tener relaciones por la noche sea nula, sin embargo, el hombre, generalmente, tiende a querer mantener relaciones sexuales precisamente para arreglar ésta situación.

 

Otro factor importante es el “miedo”, tener miedo a no ser capaz de darle a nuestra pareja lo que espera, o a quedarse embarazada, o al daño que puede causar, pueden inhibir enormemente nuestra capacidad sexual.

 

Es importante que cuando sopesemos que podemos tener alguno de éstos problemas u otros derivados de éstos pensemos que un problema sexual no implica necesariamente que haya un problema con nuestra pareja o falta de amor.

 

Es importante acudir juntos primeramente a un médico y una vez descartado que exista un problema físico ir a un psicólogo especializado en problemas sexuales que generalmente exigirá una cooperación mutua para solventar el trastorno.

 

 

¿Pensáis que un problema sexual puede afectar la relación de pareja?
 
 
 
 

miércoles, 8 de mayo de 2013

¡DISFRUTEMOS COMO NIÑOS!



¿Cuántas cosas hubiésemos deseado de niños que no tenemos ahora?

 

Aunque nos parezca increíble las vivencias emocionales en nuestra infancia así como aquellos mensajes negativos o positivos que hemos recibido en nuestra niñez son fundamentales para poder entender por qué somos como somos en nuestra vida.

 

Pero el pasado, como he dicho muchas veces, no se puede ya cambiar y únicamente nos es práctico para aprender de aquellos errores cometidos así como intentar cambiar aquello que no nos gustó de ese pasado.

 

Recuperar nuestro niño interno, ser conscientes de lo que nos faltó en nuestra infancia así como intentar dárnoslo ahora en el presente es fundamental para nuestro crecimiento personal.

 

Muchos hemos recibido de nuestros padres muchas frases negativas e hirientes que interiorizamos en nuestra infancia y nos ha traído, al ser adultos, serios problemas a la hora de sentirnos realmente plenos en nuestra vida. Ese “es que eres idiota, no sabes hacer nada” , “no llores como una niña”, “eres un inútil”, “¿nunca vas a hacer nada bien? Mira tu hermano que notas más buenas saca!”… etc.

 

Yo quiero que hoy os imaginéis siendo niños, y penséis qué os faltó… qué os gustaría haber tenido en esos momentos, con qué hubieseis disfrutado, qué os podían haber aportado vuestros padres… y que poco a poco empecéis a daros todo aquello que os apetece.

 

Yo recuerdo que el día de mi Comunión íbamos a ir a El parque de Atracciones, es lo que más me apetecía del mundo! Pero al llegar había tanta gente que al final fuimos al parque de al lado de mi casa, yo me sentí enormemente decepcionada! Era mi día, el que yo sentía más importante de mi vida! Y no entendía por qué no podíamos entrar… qué más da que hubiese mucha gente???  Desde que comencé a ser tan mayor como para ir yo solita… nunca en  20 años he faltado a mi cita anual con ese maravilloso parque que me hace sentir de nuevo una niña.

 

Quizá no nos dejaban comer helados de hielo por si nos poníamos malos, o quizá no nos dejaban salir de viaje por si nos pasaba algo, no nos leían cuentos por las noches, o nunca nos dijeron un “te quiero”…

 

Intentad visualizaros siendo niños, en ese momento en el que sentisteis que algo os faltaba, puede ser siendo bebés o algo más mayores… analiza qué sentías, cómo era esa situación, cierra los ojos e intenta ver qué carencias tuvistes y aprende a mimar a ese niño interno que todos llevamos: si nos inculcaron no hacer tonterías por el miedo al ridículo vístete de payaso y  reíros de vosotros mismos o haced reír a los demás, si sentisteis que no os dedicaron el tiempo que necesitabais de cariño mimaos a vosotros mismos, si os metieron muchos miedos hacedles frente!!

 

Pasa tiempo contigo mismo, cuídate, mímate, sorpréndete de esas pequeñas cosas que te hacían sentir maravillosamente bien cuando eras niño, vive aventuras, escúchate… porque tú y solo tú eres único, diferente y especial!!

 

¿Qué carencias tuvisteis en vuestra niñez?